Soft Morning: El arte de transformar tu rutina otoñaL.
- Alessandra Batalla
- hace 3 días
- 3 Min. de lectura
Hoy te quiero proponer algo diferente, quiero que todo este mes lo planemos con intención, que hagamos todos los rituales para conectar, ser mejores, amarnos más y evolucionar. Recuerda que seguimos en el ciclo DELULU.
Spoiler alert: No necesitas tener una taza de matcha perfectamente espumada ni una bata de seda importada para vivir una soft morning. Lo que sí necesitas es una pizca de intención, un toque (putatzo) de amor y muchas ganas de tratarte como la protagonista de tu propia película otoñal.
Porque sí, el otoño llegó. Y con él, la oportunidad de convertir tu rutina en un ritual de amor propio que grite:
“Me merezco belleza, aunque mi agenda esté más saturada que el feed de Pinterest en octubre.”
Ritual #1: bebida mañanera como hechizo.
No es solo cafeína. Es alquimia emocional. Prepara tu café como si fueras una bruja moderna invocando claridad mental. Ponle canela, ponle intención, ponle esa playlist que te hace sentir como si fueras a escribir un bestseller desde tu cocina.
Tip descarado: Si no tienes café, haz agua caliente con limón y finge que es un elixir ancestral. El punto es el gesto, no el ingrediente.
Ritual #2: Journaling sin censura
Olvídate del “hoy agradezco por mi salud”. Escribe lo que realmente sientes. Hazlo con plumón grueso, con letra fea, con emojis si quieres. Tu diario no es para Instagram. Es para liberar el caos con estilo.
Ejercicio:
¿Qué parte de ti necesita más ternura hoy?
¿Qué estás evitando sentir?
¿Qué frase te gustaría que alguien te dijera esta mañana?
Dítela tú. Escríbela. Pégala en tu espejo. Hazla mantra. Inspirate en autores que no pidieron permiso para crear un arte diferente, eres arte, y el arte también se ve así:
Ritual #3: Encender una vela como si fuera un portal
No subestimes el poder de una vela. Encenderla es decirle al universo: “Estoy aquí”. Estoy presente. Estoy lista para lo que venga, aunque venga en pants.”
Extra: Elige aromas que te hagan sentir abrazada por una abuela brujil. Vainilla, sándalo, calabaza especiada. Si no tienes vela, prende una app de fuego virtual. Lo importante es el ritual, no el presupuesto. ¡Aquí podemos hacer un mini ritual! Siempre es buen momento para manifestar.
Ritual #4: Vestirte para ti (aunque nadie te vea)
Ponerte ese suéter suave, ese lipstick vino, ese collar que te hace sentir poderosa. No porque tengas junta. No porque alguien te va a ver. Sino porque tu cuerpo merece ser adornado por tu propia intención.
Mood: Recuerda que está comprobado que si te sientes down, el verte como te gusta inmediatamente te hace sentir poderosa, y ayuda al cambio de ánimo, ¿imagínate tener este superpoder en tu día a día?
Ritual #5: Música que te haga sentir como si caminaras en cámara lenta
Haz una playlist que diga: “Soy arte en movimiento.” Incluye canciones que te hagan cerrar los ojos y pensar: “¿Quién soy y por qué no tengo mi propio soundtrack?” y la magia empieza cuando comienzas a creer ese soundtrack, me gusta pensar que cada día es un capítulo nuevo en mi serie, ¿qué canción sería perfecta para este capítulo?
Bonus track:
Crea una playlist para ocasiones específicas, como una cita contigo, self-care, skin care routine, etc.
Recuerda que cada palabra que sale de tu boca es una manifestación, ¡elige las canciones para manifestar todo!
Escucha la música como más te guste, con audífonos, fuerte, canta, baila, conecta contigo cada momento que te da oportunidad esta bella película llamada vida.
Romantizar tu rutina no es una moda. Es una forma de resistencia suave. Es decirle al mundo: “No me voy a perder en el ruido. Me voy a encontrar en los gestos.”
Así que mañana, cuando te despiertes, no corras. Hazlo lento. Hazlo bonito. Hazlo tuyo. ¡Sé única a cada paso!
Porque tú, querida bruja otoñal, mereces una rutina que te abrace antes de que el mundo te exija.
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